CashFlow
«El querer hace libres, ya que querer es crear: así enseño yo.
Y ¡solamente para crear debéis aprender!»
— Nietzsche, F.: Así habló Zaratustra. De las viejas y nuevas tablas, p. 382.
He probado diferentes aplicaciones y plataformas web para gestionar mis gastos y llevar un control más preciso de mis finanzas personales. Un par de años después, puedo decir que lo único que lograron fue frustrarme al usarlas. No entiendo por qué son tan limitadas (mermadas). Por fortuna, este enojo y, quizás, el resentimiento hacia estas herramientas me llevó a tomar la decisión de construir una solución personalizada que se ajustara a mi forma de entender y manejar las finanzas personales.
A continuacón verás una descripción poco técnica del proyecto. Si deseas ver los detalles técnicos pues visitar CashFlow
Un enfoque más personalizado
La mayoría de las apps que probé no dejaban mucha libertad para personalizar categorías o establecer prioridades de gastos de la manera que nosotros queríamos. O bueno, también está la opción de pagar, pero como dice Don Carlos Mario Aguirre: ¿Para qué estudiamos pues mk? Además, quería responder algunas preguntas:
- ¿Cuál es el impacto real de cierto gasto que hago casi a diario?
- ¿Cómo manejar gastos como el café de cada mañana sin añadirlo manualmente todas las veces?
Cashflow es entonces esta solución. Un proyecto que no solo cubre la parte de registros básicos, sino que ofrece:
- Gastos recurrentes: Para no volver a escribir el mismo ítem cada día o semana.
- Gestión de presupuestos y prioridades: Ajustándose a mi forma de ver y clasificar las finanzas.
Aprendiendo a integrar OCR
Otra de las motivaciones centrales fue la exploración de técnicas de OCR (Optical Character Recognition). Me interesaba la idea de tomar una foto de un recibo o factura y dejar que el sistema hiciera la mayor parte del trabajo:
- Detectar automáticamente fechas, importes y categorías.
- Registrarlos sin que el usuario deba teclear nada.
Era un paso más para aligerar la carga de gestionar mis finanzas: basta con subir la imagen y dejar que el software procese la información.
Un presupuesto “demasiado elaborado”
¿Vale la pena tanto esfuerzo para un presupuesto personal?
Sí
Cashflow no es solo una herramienta para controlar gastos, sino una forma de probar hasta dónde puedo llegar a la hora de personalizar la experiencia de gestión de finanzas, integrando funcionalidades avanzadas como la detección automática de recibos. Además, me permitirá valorar todas aquellas otras aplicaciones a las que llamé “limitadas”.